Kim Jong Un llegó este martes a Rusia para mantener un encuentro con el presidente Vladimir Putin con el objetivo de abordar “temas sensibles”, mientras las especulaciones apuntan hacia un acuerdo armamentístico entre ambos países. El líder norcoreano había partido el domingo desde Pyongyang en su tren blindado, acompañado por una importante comitiva de oficiales militares.
La agencia estatal rusa Ria Novosti confirmó que el convoy cruzó el martes la frontera por el krai de Primorie. Desde ambos gobiernos confirmaron la reunión y aunque no precisaron fecha ni lugar de la cita, la segunda desde abril de 2019, se cree que ocurrirá en Vladivostok, en el Lejano Oriente, este miércoles.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo que en la cumbre se tratarán asuntos «sensibles» para los dos países vecinos, pero aclaró que no habrá “ninguna divulgación o anuncio público” al respecto.
Analistas externos estiman que el encuentro será probablemente en Vladivostok porque Putin está allí para participar del Foro Económico Oriental de Vladivostok, donde hoy intervendrá en la sesión plenaria. Creen, además, que todo culminará con un acuerdo de venta de armas, pese a las advertencias de Estados Unidos.
«Al construir relaciones con nuestros vecinos, incluida Corea del Norte, lo importante para nosotros es el interés de nuestros dos países y no las advertencias de Washington», agregó Peskov, quien adelantó que las conversaciones entre ambos líderes incluirán cuestiones relacionadas con las relaciones y la cooperación bilaterales, los vínculos comerciales y económicos y los intercambios culturales, así como sobre asuntos internacionales y regionales.
Las mismas fuentes señalaron que Moscú quiere proyectiles de artillería y misiles antitanque norcoreanos para su operación militar en Ucrania, a cambio de tecnología avanzada para satélites y submarinos nucleares y ayuda alimentaria para Pyongyang.
El líder del país asiático, poco avezado a viajar al extranjero, no había salido de Corea del Norte desde que comenzó la pandemia del covid-19. Según la agencia estatal KCNA, en Pyongyang recibió una «calurosa despedida», con numerosos altos cargos reunidos en la estación y una alfombra roja tendida hasta la entrada al tren blindado.
El viceministro ruso de Exteriores, Andréi Rudenko, señaló este martes, también en Vladivostok, que el tema del suministro de ayuda humanitaria a Corea del Norte puede ser uno de los temas que aborden Putin y Kim, mientras que Peskov añadió que Rusia está dispuesta a continuar además las conversaciones sobre las sanciones occidentales a Piontang si así los «camaradas» norcoreanos desean tocar esta cuestión.
Cómo es el tren blindado de Kim Jong Un y cómo llegó a Rusia
Según un breve texto enviado a medios por un portavoz del Estado Mayor Conjunto (JCS) surcoreano, el tren cruzó el Puente de la Amistad del Río Tuman, la única vía de transporte terrestre que conecta los dos países, «a primera hora de la mañana» (hora local) de este martes.
De momento se desconoce si se han realizado los cambios pertinentes en el tren del líder norcoreano para que éste pueda circular por las vías férreas de Rusia (cuyo ancho de vía es diferente al usado en Corea del Norte), un procedimiento que puede llevar horas.
Desde la capital norcoreana hasta el puente fronterizo sobre el río Tuman hay unos 560 kilómetros, mientras que desde Jasán, la primera estación rusa al otro lado de la divisoria, hasta Vladivostok, restan otros 200 kilómetros de vías férreas.
Según las fotos publicadas por medios norcoreanos, a Kim le acompañan los ministros de Exteriores y Defensa, Choe Son-hui y Kang Sun-nam, y altos representantes militares, incluyendo al director del Departamento Industrial de Munición, Jo Chun-ryong.
En la comitiva también parece estar Pak Thae-song, secretario para Ciencia y Educación del Comité Central del Partido de los Trabajadores que está ligado al programa espacial norcoreano.
El tren de Kim, además de constar al menos de una veintena de vagones, es más pesado de lo normal debido a su grueso blindaje y, por lo tanto, más lento. Lo utilizó por primera vez en 2018 para viajar a Beijing, en China. Según presunciones, la velocidad máxima que puede alcanzar es de 60 kilómetros por hora.
Con información de agencias.