En la mañana del martes se dio a conocer que Mendoza y Buenos Aires se convirtieron en las primeras ciudades hispano latinoamericanas en ser examinadas por los inspectores de la Guía Michelin. El anuncio se hizo oficial con la presencia de Elisabeth Boucher-Anselin, directora de comunicaciones global de la Guía Michelin, y Matías Lammens, Ministro de Turismo y Deportes de la Nación.
El convenio logrado por Argentina con la guía gastronómica más respetada del mundo que está presente en más de 40 destinos de Europa, América y Asia tendrá como mínimo una duración de tres años, con opción de renovarse e implicó una inversión por parte del Instituto Nacional de Promoción Turística (Inprotur) de 620.000 dólares.
La Guía Michelin, creada en 1900 por la empresa de neumáticos Michelin, otorga hasta tres estrellas a las mejores experiencias culinarias del mundo: una para los restaurantes por “cocina de alta calidad que vale la pena detenerse”, dos estrellas por “excelente cocina que vale la pena desviarse” y tres estrellas por “cocina excepcional que vale la pena un viaje especial”.
En este sentido, son cinco los criterios en los que se basan para garantizar la fidelidad de sus recomendaciones: la calidad de los productos; el dominio de las técnicas de cocina; la armonía de los sabores; la personalidad del chef expresada en la cocina; y la consistencia del menú a lo largo del año.
Como lo dijo la directora de comunicación de la Guía Michelín, “una estrella vale lo mismo Argentina que en Tokio o Francia”, por lo que las propuestas mendocinas y porteñas se equipararán con las de las ciudades más visitadas del mundo. De hecho, para asegurar estos criterios, los “inspectores” ya están en nuestra provincia y es probable que visiten un mismo espacio gastronómico en varias ocasiones para evaluar su constancia antes de brindar un veredicto final.
El 24 de noviembre se sabrá quienes obtuvieron la distinción.
Voces menducas
Nora Vicario, ministra de Cultura y Turismo de Mendoza, quien estuvo sentada en primera fila en la presentación realizada en el hotel Four Seasons de Buenos Aires, calificó el hecho como histórico y expresó: “Esto es un reconocimiento al trabajo, a la hospitalidad y la calidad de restaurantes, bodegas y productores que ofrecen propuestas únicas y diversas basadas en nuestra identidad, nuestros recursos y que crecen de la mano del impulso público y privado para promover, proyectar y fortalecer la actividad”.
La Guía Michelin solo estará en formato digital en Argentina.
Por su parte, Beatriz Barbera, miembro de Asociación Empresaria Hotelero Gastronómica y Afines de Mendoza (Aehga), también presente en la cita, remarcó que se trata de un hito que pone a la provincia en el mapa de los principales destinos gastronómicos mundiales mundiales. La referente local aseguró que si al menos uno ya aparece “la marca Mendoza y sus productos identitarios ya se posiciona entre las grandes capitales gastronómicas del mundo”.
“Mendoza es una ciudad maravillosa para el vino, pero lo que queremos decir es que también lo es para comer, porque los restaurantes son fantásticos. Obviamente nos encanta compartir una comida con un gran vino, pero no queremos que se imaginen que llegamos allí por el vino solamente. Hay chefs y equipos talentosos, y de eso es lo que queremos hablar”, argumentó Boucher-Anselin.
Desde el punto de vista de la Guía, que viene siguiendo los destinos desde hace años, Mendoza y Buenos Aires han logrado una madurez donde los inspectores anónimos, que se encuentran evaluando los destinos desde hace tres meses y lo seguirán haciendo hasta el anuncio, pueden hacer una selección adecuada. Cabe aclarar que no todos los restaurantes van a ser incluidos en la Guía, sino que los que ellos visitan son potenciales a recibir estrellas.