El régimen de Daniel Ortega retiró la señal del aire, sin dar explicaciones. Este año ya cerró varias radios y diarios.
El gobierno de Nicaragua bloqueó sorpresivamente las emisiones de la señal internacional de noticias CNN en español, sin dar ninguna explicación, informó este jueves la propia cadena en su página de internet.
«El gobierno de Nicaragua sacó nuestra señal de televisión, negando a los nicaragüenses noticias e información de nuestra cadena, en la que han confiado durante más de 25 años», indicó CNN en Español en un comunicado.
El bloqueo de las emisiones se produjo el miércoles a las 22.07, hora local, y «el gobierno de Nicaragua no se ha pronunciado acerca del porqué» tomó esa decisión, agregó la cadena, que opera en el país desde hace 25 años.
«CNN ha intentado obtener algún comunicado tanto del gobierno como de los cableoperadores que llevan la señal de CNN en Español, sin obtener respuesta», agregó.
La emisora de noticias recordó que las Naciones Unidas han expresado su preocupación por los ataques del gobierno del presiente nicaragüense, Daniel Ortega, contra «la Iglesia, la prensa independiente y los defensores de derechos humanos en Nicaragua».
«En CNN en Español creemos en el papel vital que juega la libertad de prensa en una democracia saludable», aseguró la cadena, y agregó que seguirá cumpliendo con su «responsabilidad con el público nicaragüense», ofreciendo sus noticias a través de su página de internet «para que puedan tener acceso a información que no está disponible de otra manera».
Finalmente, la cadena informativa expresó su respaldo a los informes de sus periodistas y reafirmó su «compromiso con la verdad y la transparencia».
La oposición, amordazada
Nicaragua atraviesa una crisis política y social desde abril de 2018, que se ha acentuado tras las controvertidas elecciones generales del pasado 7 de noviembre, en las que Ortega fue reelegido para un quinto mandato, cuarto consecutivo y segundo junto con su esposa, Rosario Murillo, como vicepresidenta, con sus principales contrincantes en prisión.
En esta última etapa de gobierno, Ortega ha cerrado al menos 51 medios de comunicación, incluyendo 23 en agosto pasado, la mayoría propiedad de la Iglesia Católica, así como 15 espacios informativos, y confiscó diferentes medios de comunicación, incluyendo La Prensa, el diario más antiguo e influyente del país.
Además, en el último año, el Ejecutivo nicaragüense detuvo a más de 40 opositores y críticos, y les impuso condenas de hasta 13 años de cárcel.
Entre ellos figuran los periodistas y políticos Pedro Joaquín y Cristiana Chamorro Barrios, hijos de la ex presidenta nicaragüense Violeta Barrios de Chamorro (1990-1997) y del periodista antisomocista asesinado Pedro Joaquín Chamorro Cardenal.
Ambos fueron condenados en marzo pasado a 9 y 8 años de cárcel, respectivamente, por delitos considerados «traición a la patria».
Esta semana, un grupo de 13 organizaciones opositoras nicaragüenses acusaron al presidente Ortega de establecer «un Estado de excepción de facto y terror», así como de «partido único» en Nicaragua.
«La estrategia de Ortega y Murillo es implantar un Estado de excepción de facto y terror en contra de la ciudadanía nicaragüense», denunciaron en un pronunciamiento las organizaciones, entre ellas la Unidad Nacional Azul y Blanco, y el Movimiento en Defensa de Nuestra Tierra, Lago y Volcanes (Movimiento Campesino).
Ortega, próximo a cumplir 77 años, lleva 15 años y 7 meses consecutivos en el poder, en medio de denuncias de autoritarismo y fraude electoral.
Fuente: EFE y AFP
CB