El Gobierno provincial informó que enviarán al Laboratorio Malbrán muestras de un paciente sospechoso de viruela símica. Se trata de una persona de mediana edad, procedente de España, que presenta síntomas leves y compatibles con la enfermedad.
Andrea Falaschi, directora de Epidemiología de la Provincia, dependiente del Ministerio de Salud, Desarrollo Social y Deportes, informó sobre “un caso de un paciente sospechoso de viruela símica, de mediana edad, que vino de viaje a visitar a su familia desde España, a principio de este mes”.
La semana pasada aparecieron algunas lesiones que alertaron al paciente por lo que consultó al sistema salud. “Ante lesiones sospechosas, se tomaron muestras para descartar distintas enfermedades y mañana se estarán enviando a la Administración Nacional de Laboratorios e Institutos de Salud (ANLIS) Dr. Carlos Malbrán, para hacer el estudio de viruela símica”, continuó la funcionaria.
“El paciente se encuentra en buen estado, es un caso leve. Está aislado en su domicilio, con sus contactos familiares, que están todos bien y no tienen síntomas”, finalizó Falaschi.
En la última semana de mayo, el Ministerio de Salud de la Nación informó el primer caso sospechoso de viruela símica o del mono en la Argentina. Se trata de un residente en la provincia de Buenos Aires. Mientras que a principios de junio, ya se habían confirmado tres casos en pacientes que se encontraban en buen estado de salud, sin haber presentado complicaciones.
El contagio
La viruela símica se transmite de una persona a otra por contacto cercano con lesiones, partículas respiratorias y materiales contaminados, como la ropa de cama.
Esto incluye genitales o el área perigenital, lo que indica que la transmisión probablemente ocurra a través del contacto físico durante actividades sexuales.
Los síntomas clásicos son: fiebre, dolor de cabeza, muscular o de espalda, inflamación de ganglios y cansancio.
Entre 1 y 5 días posteriores se agrega erupción en la piel, que pasa por distintos estadios hasta formar una costra que luego se cae. Las personas infectadas contagian hasta que se hayan caído todas las costras.